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El Tantra se origina en el Valle del Indo, desde la India y el Pakistán actual, llegando hasta la anatolia turca. Nace entre el año 3000 a.C al 2.500 a.C en ciudades como Harappa, Mohenjo-Daro, Catal-Hüyük, o la desconocida Lothal, y todas ellas "redescubiertas por casualidad" a principios del siglo XX debido a las obras del ferrocarril en la India dominada por la ocupación británica.
Por ejemplo, Mohenjo-Daro, uno de los primeros asentamientos urbanos "planificados" del mundo, se descubre en el año 1920 por Sir John Marshall, y hace 4.500 años ya contaba con baños en cada casa, sistemas de alcantarillado y recolección de agua de lluvia como los de hoy en día.
Hasta entonces nadie tenía constancia que existió en los antiguos territorios de las ahora, India y Pakistán, una civilización conocida como Cultura Harappa (por la ciudad). Se creía que los pueblos arios de piel clara eran los que habían existido siempre en el Valle del Indo. Pero a finales del S. XX empezamos a conocer que antes de ellos existía todo un imperio o Periodo Harappa, formado por el pueblo DRÁVIDA, proveniente de la zona alpino-mediterránea, y de tez más oscura.
Según S.R. Rao, autor del libro "Lothal and the Indus Civilization", la cultura Drávida era eminentemente matriarcal, adoraban a la Gran Divina Madre (se han encontrado santuarios dedicados a ella casi en cada casa), dando muchísima importancia a la mujer, al arte y a la cultura, y vivieron en paz con las diferentes tribus aborígenes originarias de esos territorios durante al menos 1.000 años.
"Numerosas figuritas provenientes del imperio del Indo evocan posturas de yoga. Aparentemente practicaban el yoga y habían desarrollado la ciencia de la disciplina mental y física hasta un grado muy elevado. Incluso sus dioses están representados en actitud meditativa. Una de las mayores contribuciones de la civilización del Indo es la de la ciencia del yoga"
Posteriormente unos pueblos arios de cultura patriarcal, de piel blanca, nómadas, guerreros y ladrones de ganado y de mujeres (los mismos que inventaron el injusto sistema de castas en la India y desarrollaron la doctrina religiosa conocida como hinduismo), invadieron esos territorios pacíficos de la cultura Harappa integrada por los 'drávidas', de tez ligeramente más oscura, cuyo imperio ya estaba menguando debido a las inundaciones fluviales continuas del río Indo y la tala de árboles para alimentar los hornos de ladrillos/industria cerámica, que provocaron una gran desertización.
Los vencedores, como es habitual, ocultaron todo rastro de la existencia de los vencidos, y si no hubiera sido por el azar, las obras del ferrocarril, y la ocupación inglesa de la India que evitó su destrucción, todo ese conocimiento aún permanecería oculto y perdido.
En el tantra no pueden haber problemas de orden moral sobre lo que “la sociedad dice que es correcto y aceptable, y lo que no lo es", tal y como dijo Osho:
"El Tantra no es un concepto moral. No es ni moral ni inmoral: es amoral"
El Lam Rim (en tibetano), describe "LAS ETAPAS DEL CAMINO A LA LIBERACIÓN". Así pues, la falsa moralidad no deja de ser una capa de niebla que oscurece la personalidad humana, evitando el autodescubrimiento de uno mism@.
Hay una diferencia en cómo son las cosas realmente y como las percibimos nosotros. Cuando la moralidad es una limitación en el propio camino interior, hay que superarla como harías con cualquier otro obstáculo (siempre y cuando la propia motivación sea el trabajar por el bien de todos los seres, incluido uno mism@).
Los tántricos indios le tienen mucho miedo a la moralidad, no es de extrañar. Durante la dominación británica de la India, (el RAJ "gobierno" británico"), los hinduistas (de la mano de la casta sacerdotal Brahmin),hicieron perseguir sin tregua esta doctrina que los mismos brahmines apodaron "Tantra de la mano izquierda", (como campaña de desprestigio puesto que les robaba muchos adeptos al hinduismo "tradicional").
En la India, todo lo que pertenece a la mano izquierda es sucio, negativo y siniestro. Nunca se toca la comida con la mano izquierda.
Los hinduistas vieron en el poder británico, (ignorante de las tradiciones ancestrales indias), un inesperado aliado, y juntos persiguieron a los tántricos, sobre todo en el noroeste de la India (a los "Shaktas", de la Escuela 'Shakta Tantra', que defendían que solo existe una Divinidad, Adi Shakti), y cuyos integrantes fueron acusados de barbarie, idolatría (culto a Kamakhya, diosa del deseo) y perversión sexual.
Durante las persecuciones, miles de practicantes tántricos murieron ejecutados o asesinados.
Pero no era la primera persecución que sufrían.
Ya en el siglo IX fueron perseguidos sin piedad, y las famosas esculturas del templo de las 64 yoguinis fueron destrozadas.
Y todo en aras de la "moralidad" y de la lucha contra todo aquello que intente subvertir el poder establecido del sistema de castas y del "status quo" imperante:
“La moralidad es sumamente poderosa, no es sólo una forma de auto-regularse, y evitar así sufrimientos innecesarios, sino que también es una forma de conquistar (negativamente) a los demás”
Relatos del Dharma – Shri Khaishvara Satyam
En definitiva, para practicar tantra libremente necesitas liberarte de las construcciones mentales, de los juegos mentales que nos esclavizan y no nos dejan disfrutar de lo que nos aporta esa energía que necesitamos imperiosamente para no caer en hábitos de pensamiento depresivo.
Estos mecanismos mentales muy occidentales, provenientes de la cultura religiosa de los últimos 5.000 años, como por ejemplo, el castigo, la culpa, la no-satisfacción personal de nuestras necesidades más íntimas, el remordimiento, … NOS IMPOSIBILITAN SER LIBRES, más allá de la angustia y la no satisfacción del deseo.
Esta misma actitud autoculpabilizante (juzgarnos y juzgar a todo el mundo), muchas veces nos imposibilita amar de verdad, (a nuestra pareja o a nuestros parientes o amigos), y dejar atrás nuestra propia individualidad egoica.
Luis Boleda es el coordinador espiritual de FELITIA GLOBAL COACHING®, instructor en Mindfulness y autor del libro "La Wifi de Dios"
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