CUANDO LOS CIENTÍFICOS SON LOS PROTAGONISTAS DE UNA ECM

”La mente intuitiva es un regalo sagrado y la mente racional es un fiel sirviente. Hemos creado una sociedad que honra al sirviente y ha olvidado el regalo" - Albert Einstein

CIENTÍFICOS PROTAGONISTAS DE UNA ECM

Los científicos, médicos, enfermeras y otros profesionales sanitarios, son seres humanos como cualquiera de nosotros.

Ellos también sufren accidentes o enfermedades y experimentan circunstancias que les convierten en protagonistas de sucesos que entran dentro del ámbito de influencia de las ECM.

Su preparación les convierte en testigos aventajados. Y entonces empieza la carrera por dar sentido a las Experiencias Cercanas a la Muerte (ECM), desde un punto de vista racional y científico, (aunque no siempre se consigue).

Y entre ellos, nos encontramos con multitud de científicos.

Estos son los casos reales de médicos, todos ellos muy cualificados, que transmitieron su experiencia, aún a riesgo de poner sus carreras en entredicho ante la comunidad científica internacional.

Expongamos 4 casos.

LOS CIENTÍFICOS EXPLICAN SU HISTORIA

1. EL CASO RODONAIA

Una de las experiencias más impactantes jamás narradas por un profesional de la sanidad es, sin duda, la protagonizada por el Dr. George Rodonaia, el cual es doctor en medicina y además tiene un doctorado en neuropatología.

Esta es su ECM:

Cuenta que fue dado por muerto después de un atropello (posiblemente intencionado al tratarse de un disidente político soviético). De repente, se encuentra a sí mismo en una especie de cuerpo no-físico, deambulando por los pasillos del hospital donde había sido trasladado, (y en cuyo depósito de cadáveres estuvo nada menos que 3 días).

En esos pasillos detecta los lloros desconsolados de un bebé.

Según el doctor, se interesa por su estado, y el bebé le cuenta (de forma telepática) que le duele mucho el brazo.

Además en sus paseos por el hospital, detecta que hay un zapato en una cornisa de la fachada que da a la calle.

Cuando el forense procede a practicarle la autopsia, (después de esos tres días de haber sido declarado muerto), el Dr. Rodonaia despierta de su estado de muerte clínica, al practicarle la incisión inicial.

Inmediatamente explica a los pediatras que en el departamento de neonatos se encuentra un bebé llorando desconsoladamente a causa de un hueso torcido y roto en su brazo (posiblemente provocado durante el parto), lo cual se demuestra como totalmente cierto.

Posteriormente se comprueba que efectivamente había un zapato en una de las cornisas y exactamente donde el médico había dicho que estaría. En este vídeo de youtube podréis visualizar la experiencia del Doctor Rodonaia.

Puede que exista algo que tiene tendencia a salir del cuerpo físico cuando las condiciones se ponen “difíciles”, retornando a él cuando las “labores de mantenimiento”, ya están terminadas.

Pero veamos más casos inexplicables.

2. EL CASO EBEN ALEXANDER

El caso del neurocirujano especializado en neuro endocrinología, Dr. Eben Alexander se ha venido a llamar “el caso perfecto”.

No existen muchas personas que conozcan más la anatomía y procesos del interior de un cerebro humano (y sus reacciones ante un coma), como un neurocirujano endocrinólogo.

Por este motivo, resulta increíble que el Dr. Alexander sufriera una enfermedad única en el mundo de la que sólo él ha sido víctima. Se trató de una meningitis cerebral por infección de bacteria E.coli y que solo se adquiere después de una cirugía con abertura de tapa craneal, (que no era el caso del Dr. Alexander).

Sus posibilidades de sobrevivir después de 7 días en coma con la bacteria e-coli comiéndole el neocórtex, eran sobre el 5%.

Y en caso de sobrevivir, los especialistas (como él mismo era) le daban por vegetal, ya que con el cerebro tan dañado nunca volvería a ser el mismo. O sea el Doctor Eben Alexander contrajo una enfermedad:

- Imposible de contraer.

- Mortal de necesidad y de imposible tratamiento.

- Y que, con suerte, le dejaría sin capacidades cognitivas el resto de su vida.

Afortunadamente para él, y de forma milagrosa, nada de esto sucedió. No sin esfuerzo, consiguió despertar rodeado del cariño de familiares y amigos, y tras un periodo de adaptación al difícil trago de permanecer una semana en coma al borde de la muerte, consiguió paulatinamente, volver a ser el que era,… o casi.

Su visión sobre la "realidad" de la existencia humana nunca volvió a ser la misma…

¿Qué vio durante su coma que le hizo rechazar su visión materialista y mecanicista del mundo por otra mucho más espiritual?

Esta es su Experiencia Cercana a la Muerte (ECM): Para todos aquellos que quieran leer por completo su libro “La Prueba del Cielo”, solo comentar que primero despertó en un lecho cenagoso y oscuro donde la existencia no disponía del concepto tiempo, y donde criaturas animalescas brotaban durante breves instantes a la superficie para luego volver a desaparecer.

Fue rescatado de allí por una criatura parecida a una mariposa, pero con una cara con rasgos humanos, (y que posteriormente fue una prueba irrefutable de la veracidad de la experiencia, pero no queremos hacer spoilers...) que le transportó a un lugar celestial donde entre otras cosas, conoció a Dios (Om), y aprendió de forma instantánea, todos los secretos del Universo, sin necesidad de memorizarlos y para siempre.

Su experiencia dejó en el neurocirujano una profunda huella. Hasta tal punto fue así que fundó su propia fundación para fomentar el estudio de la física de la consciencia y la relación entre ésta y la realidad (materia/energía).

Se puede encontrar en www.eternea.org

En sus propias palabras:

“Cuanto más recobraba la visión científica durante mi recuperación, más comprendía de qué manera entraba en conflicto todo lo que había aprendido durante décadas de formación y práctica de la medicina, con todo lo que había aprendido y experimentado durante la ECM, y más me daba cuenta de que la mente y la personalidad (el alma o el espíritu), siguen existiendo más allá del cuerpo.” – Dr. Eben Alexander

3. Dra. YVONEE KASON

La doctora Kason es una reputada médico y psicoterapeuta canadiense, la cual, a resultas de una experiencia muy traumática, empezó a interesarse por estos temas, llegando a ser considerada una investigadora líder en su campo.

Creadora del término "Experiencias de Transformación Espiritual" , Spiritually Transformative Experiences STE. Ella define estas experiencias como

"Parte de una expansión y una transformación de la conciencia en la que nos convertimos de forma intermitente en seres capaces de percibir otros niveles de la realidad , incluyendo lo que podríamos considerar las dimensiones místicas o paranormales"

Su experiencia personal tuvo lugar en 1979, cuando contaba con 26 años de edad. Durante una emergencia en un entorno rural, un mujer indígena en estado crítico tuvo que ser evacuada en avión a un hospital. La acompañaba la joven doctora Kason y demás personal sanitario.

Debido a una ventisca, los dos motores se congelaron. El avión se estrelló contra la superficie de un lago congelado. La paciente falleció y la doctora Kason también, pero una luz brillante rescató su consciencia.

Después de llamar a la puerta y ser recibida, su anfitriona le confesó tener en ese preciso instante un terrible dolor de cabeza.

Inicialmente remisa a narrar la visión inicial, la Dra. Kason le explicó finalmente lo que había intuido y los pasos a seguir.

Según ella misma narra, debido al precoz diagnóstico, pudo salvar la vida de su amiga sin efectos secundarios.

La doctora Kason plasmó esa misma experiencia y otras en un libro titulado "Farther Shores" (Las orillas más lejanas) en el que explica su propia experiencia personal y como influyó ésta en el resto de su carrera profesional.

También comparte las ECM`s de pacientes, amigos y colegas.

En sus propias palabras :

" ... Es una guía para las innumerables personas que están actualmente en proceso de las "Experiencias de Transformación Espiritual" que incluyen experiencias cercanas a la muerte, experiencias místicas, episodios psíquicos, el clásico despertar de la Kundalini y creatividad inspirada. También es una guía para los médicos, psicólogos y terapeutas a los que estas personas recurren -a veces desesperadamente- para encontrar ayuda en el aprendizaje de cómo integrar sus experiencias extraordinarias en su vida cotidiana ordinaria "

4. EL CASO JUNG

El famoso psiquiatra suizo Carl Gustav Jung, vivió una de esas experiencias fascinantes que tiene consecuencias en los dos mundos; el mundo extraño de las ECM con su propio sistema de percepción, pero también en el "mundo real" con acontecimientos asombrosos.

Corría el año 1944 cuando el médico, psiquiatra y divulgador del inconsciente personal y colectivo, se rompió un pie y tuvo un infarto cardíaco. Como él mismo cuenta en su biografía personal, la enfermera le explicó en un momento de lucidez entre desmayo y desmayo:

"¡Estaba usted como rodeado por un claro resplandor!" - ella había visto este efecto a menudo en moribundos, lo que no era un buen augurio.

En un momento dado, Jung se vió a sí mismo flotando en el espacio sobre Ceilán, la actual Sri Lanka. La altura aproximada eran unos 1.500 kilómetros, pudiendo apreciar el continente indio y la forma esférica de la Tierra.

"La contemplación de la Tierra desde tal altura es lo más grandioso y más fascinante que he experimentado".

Asimismo contempló un meteorito del tamaño de una casa flotando por el espacio. Sobre un banco estaba sentado un "indio negro sobre un trono de loto". Llevaba vestiduras blancas y se encontraba en un estado de "impasividad total".

Dentro de un templo se dio cuenta que toda su vida desaparecía, pero que de algún modo, todas sus experiencias adquiridas se mantendrían grabadas dentro de la esencia que ahora era.

"Yo soy este haz de lo realizado y lo pasado. [...] No existía nada que pretendiese o desease, sino que permanecía, por así decirlo, objetivo: era esto lo que había vivido". [...] Primero primó la sensación de aniquilación, pero repentínamente también eso pasó [...] tenía todo lo que yo era y no tenía más que esto".

También tuvo la sensación de que ahora, en tal estado de pureza esencial, conocería a todas las "personas" o consciencias con las que realmente había estado en contacto en "el mundo real". En una realidad anterior a su vida presente en la Tierra.

"En una sala iluminada sabría lo que yo había sido antes de mí, por qué existí y adónde me conduciría mi vida en lo sucesivo. [...] Mi vida me parecía una larga cadena recortada con unas tijeras.

En ese momento una imagen procedente de la Tierra le interrumpió. Era inicialmente la imagen de su médico el cual, procedente de la zona de Europa, le decía que había una protesta por el hecho de que tuviera que marcharse, y que debía regresar.

El psiquiatra se sintió profundamente decepcionado, todo el proceso de "exfoliación", no había servido para saber quién era él realmente, puesto que ahora todo el proceso debía revertirse para que él pudiera regresar al mundo material.

¡Ahora debo volver al sistema de los cajoncitos! [...] La vida y el mundo entero parecían una cárcel y me indigné mucho al pensar que volvería a encontrarlo bien. Cuando estaba en el espacio yo era ingrávido y nada me atraía, y ahora era una cajita colgando de unos hilos."

La imagen de su médico desapareció, no sin antes adoptar lo que Jung describe como "su forma primitiva", una forma antigua, una metamorfosis en la forma de "basileus de Kos". Un Basileus era un mandatario antiguo, una especie de rey o emperador. Ver a su médico adoptar dicha forma fue interpretado por Jung como "mal agüero", puesto que en la mitología solo se adopta la forma original, "cuando se está próximo a morir".

"De pronto me vino a la mente la terrible idea de que él debe morir: en lugar mío."

Y aunque parezca totalmente increible, así fue. El médico de Jung murió de septicemia días después (que cogió el mismo día que a Carl G. Jung se le permitió sentarse al borde de su cama de hospital).

El proceso de recuperación del famoso psiquiatra aún duró varias semanas. Durante ese periodo, a Jung le pasó algo curioso. Durante el día, volver al mundo le había supuesto un golpe muy duro, se sentía frágil y débil, y estaba continuamente deprimido. Dormía hasta medianoche, momento en el que se despertaba de un humor completamente distinto.

"Me encontraba como en éxtasis o en un estado de máxima felicidad. Todo parecía estar embrujado, ¡Esto es la eterna bienaventuranza, no hay modo de describirlo, es demasiado maravilloso. [...] Casi siempre las visiones duraban una hora. [...] No soy capaz de describirlo en detalles. Había ángeles y luz; luego volvía a dormirme y ya cerca del amanecer volvía a sentir: Ahora viene la lúgubre mañana! ¡Ahora viene el lúgubre mundo con sus sistemas de celdas!"

Jung murió "finalmente" en 1961, 17 años después de estos episodios que le marcarían ya por el resto de sus días. En sus memorias, el sabio suizo llega a decir de este episodio de su vida:

"Nunca más me he librado completamente de la impresión de que la "vida" es un fragmento de existencia que se desenvuelve en un 'sistema adecuado' de magnitud tridimensional".

CONCLUSIÓN

Poco más queda añadir a todo lo anteriormente expuesto. Todos tenemos intuiciones acerca de lo que nos depara el destino. Ojalá tuviéramos la madurez suficiente para afrontar el hecho de que "quizá", no todo termine en esta vida.

Entonces puede que las decisiones que tomáramos fueran ligeramente distintas.

Luis Boleda es el coordinador espiritual de FELITIA GLOBAL COACHING^®, instructor en Mindfulness y autor del libro "La Wifi de Dios"